JULIO
Lucen teas los galayos.
En esta hora matutina
fulge el sol tras de la encina
que cierne sus áureos rayos.
Oscilan los largos tallos
al leve soplar del viento
que llega de barlovento
a besar a las espigas,
ya las cigarras y hormigas
escenifican el cuento.
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Terly
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Excelente descripción de ese julio caluroso y de maduradas mieses.
ResponderEliminarUn saludo
Terly, amigo: me están gustando mucho tus espinelas. Eres verdaderamenrte creador. Un abrazo.
ResponderEliminarLa simbiosis de lo terrestre con lo marino siempre me ha gustado y tu lo has bordado (con perdón por el "pareado")
ResponderEliminarPablo
Antonio:
ResponderEliminarAgradecido por tu visita y comentario.
Un abrazo.
Fernando:
ResponderEliminarQuerido amigo, son como un juego y con ellas me divierto.
Un fuerte abrazo.
Pablo:
ResponderEliminarAunque marino de mar salada, sé que también sabes navegar sobre ese mar ondulado de espigas cuando el viento las acaricia.
Un abrazo.