BUSQUÉ LA PAZ
Busqué la paz en el hogar paterno,
luego, en mi propio hogar;
en los halagos que prodiga el mundo,
¡espejismo fatal!
En la ternura, el gozo, la inocencia,
el amor,la amistad;
en el deber cumplido sin desmayo,
con incesante afán;
en la lisonja que alimenta el humo
de nuestra vanidad;
en la conciencia exacta de las cosas…
¡En nada de esto está!
Pero te oí, Señor “¡La paz os dejo!”,
y entonces, sin dudar,
la he buscado en tu amor, y en él estaba…
¡Porque Tú eres la paz!
Busqué la paz en el hogar paterno,
luego, en mi propio hogar;
en los halagos que prodiga el mundo,
¡espejismo fatal!
En la ternura, el gozo, la inocencia,
el amor,la amistad;
en el deber cumplido sin desmayo,
con incesante afán;
en la lisonja que alimenta el humo
de nuestra vanidad;
en la conciencia exacta de las cosas…
¡En nada de esto está!
Pero te oí, Señor “¡La paz os dejo!”,
y entonces, sin dudar,
la he buscado en tu amor, y en él estaba…
¡Porque Tú eres la paz!
Mi madre Eladia M-E. A.
3 comentarios:
muy bueno el de tu hermano.
Por cierto, supongo que Busqué laPaz es la oración del domingo.
gracias Terly.
Esa si que es la Paz de verdad y no la pazzzzzzzzzz de Rodríguez el Traidor.
Creo que la verdadera paz hemos de buscarla en el interior de cada uno, entonces es cuando podemos descubrir esa paz que nos dejó el Señor.
Preciosa oración, sin duda.
Pues la paz esté contigo, Terly.
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