MIS HUEVOS
En eterno conflicto con mi mente,
inquieto caminaba el pensamiento
cuando de pronto, casi de repente,
como un rayo llegó hasta mí su aliento.
.
Un aroma profundo, muy potente,
En eterno conflicto con mi mente,
inquieto caminaba el pensamiento
cuando de pronto, casi de repente,
como un rayo llegó hasta mí su aliento.
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Un aroma profundo, muy potente,
que portado a su grupa por el viento,
de lirismo impregnó todo el ambiente,
un poema trocado en alimento.
.
Armónico sonaba el gorgoteo
y lento se cubría lo amarillo
de blancos y dorados infinitos.
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Ante su oro y puntillas me arrodillo;
¡Qué delirio, qué gozo, qué deseo!
en la sartén, ¡un par de huevos fritos!...
.
de lirismo impregnó todo el ambiente,
un poema trocado en alimento.
.
Armónico sonaba el gorgoteo
y lento se cubría lo amarillo
de blancos y dorados infinitos.
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Ante su oro y puntillas me arrodillo;
¡Qué delirio, qué gozo, qué deseo!
en la sartén, ¡un par de huevos fritos!...
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JJRME (Terly)
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2 comentarios:
Soy Lola... Lo primero que he pensado al leer el título ha sido ¿qué les pasa a los huevos de mi amigo? Me has tranquilizado.
Un beso de esos que llegan de Madrid a Barcelona ida y vuelta
Mª Ángeles Cantalapiedra:
Qué bien que mi amiga Lola,
la fantástica y fetén,
se preocupe de mis huevos,
mis huevos de la sartén.
Si a tu Pepe le gustaran
como me gustan a mí,
en la mesa los pondría
doraditos para ti.
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